Conversamos con Yolanda Pérez, co-fundadora, directora creativa y diseñadora de Yolancris, sobre el libre albedrío, la co-creación y la arbitrariedad del trabajo en equipo.
Yolancris – Crear sobre maniquí tiene algo de fortuito y casual.
Yolanda Pérez – Al trabajar sobre maniquí dejo que las manos me guíen y que los tejidos me hablen. Cada tejido pide un volumen, silueta, pliegue, fruncido, ornamentación diferente. Diseñar en papel implicaría prever qué aspecto va a tener una pieza o una colección una vez acabada. El moulage es intrínsecamente experimental, ir hacia lo desconocido.
Algunas colecciones de Yolancris están diseñadas a partir de un concepto, tienen un hilo argumental, una narrativa.
YP – Opera Prima y Todas las primaveras de un invierno parten de una inspiración tanto conceptual como estética. Pero no todas las colecciones de Yolancris lo hacen. Crear es un proceso mucho más profundo que la pura inspiración o las musas. Y Yolancris es oficios y manos.
Entender las motivaciones del artista legitimiza su obra. Lo que se valora, como en el arte contemporáneo, no es la obra en sí sino la idea.
YP – El espectador o consumidor quiere saber qué ha motivado al creador a hacer lo que ha hecho. Pero cuando una persona hace un trabajo artístico la mayoría de las veces no tiene ni idea de qué va a salir. No hay que intentar justificar o hacer justificarse a los artistas y diseñadores de todo lo que hacen. Llenar de lecturas y capas de significado cosas que no necesariamente tienen.
La belleza de lo espontáneo.
YP – De lo espontáneo y del trabajo en equipo. Muchas manos y muchas improvisaciones provenientes de diferentes personas, con sus diferentes maneras de trabajar y sus subjetividades, intervienen en la creación sobre maniquí y en la vida de taller.
¿Todas las piezas Yolancris están co-creadas?
YP – En su mayoría. Me gusta la aleatoriedad y arbitrariedad que este proceso de trabajo genera. Hay algunas constantes en la narrativa de la Firma, como los 60, los 70, el Modernismo, las Arts & Crafts, la rebeldía, pero la maestría de los artesanos que trabajan desde hace 15 años conmigo en mi taller es mi verdadera inspiración como directora creativa y diseñadora.